LA FLORECIENTE INDUSTRIA DEL SAQUEO
El botín que producen los atracos de cincuenta bandas de delincuentes suman cinco millones de dolares. El botín que produce un atraco cometido sin fusil, pistola ni pasamontaña por un banco supera setenta millones de dolares, decía ya en 1989 el periodista uruguayo Samuel Blixen.
Bien, eso era en 1989 y en Uruguay. Pero cambiamos, y con el cambio nos refrescamos y perfeccionamos. Por estos días vemos como la vieja siembra de la trampa, el fraude y la corrupción, folorecen con inusitada fuerza en el fértil suelo de la infinita tolerancia colectiva, en toda América Latina
Es pasado el pirata con garfio, pata de palo y parche en el ojo. La industria del saqueo, tan prósprea como la de las armas, drogas y guerras, cuenta con gurúes económico financieros, que se disputan los derechos de autor de las exitosas operaciones que lograron el exilio de miles de millones de dolares a paradisíacos confines fiscales de todo el mundo, donde la libertad y la impunidad son hermanas gemelas.
En la argentina del Cambio, con más de 120 mil despidos públicos y privados en cuatro meses de gobierno, con una caída del ingreso de trabajadores, pequeños porductores y empresarios pymes superior al 50%, con un crecimiento exponencial de la inflación a indices no vividos en los últimos 20 años, los bancos en el pasado mes de febrero embolsaron bajo el sospechoso rótulo de "utilidades" más de 12 mil millones de dólares.
A este atraco que en un mes reportó mas de 12 mil millones de dolares, los gurúes lo dejaron enano. Panamá Pappers es el nombre artístico de la obra maestra de la piratería vestida de gala, con frac, galera y bastón. Allí desfila lo mas granado, la élite, los top del mundo de la política del gobierno y de los empresarios del poder real. Mas de 7,6 billones de dólares provenientes de todos los pobres del mundo distrufan de las paradísiacas playas fiscales.
Los nuestros hacen un aporte importante. Argentina ya en 2012 había exilado mas de 400 mil millones gracias a los finos oficios de maestros en el arte de robar. Amalia Lacroze de Fortabat (f), Héctor Magnetto, Gregorio y Jorge Perez Companc, la familia Blaquier completa, Eduardo Eurnekian, los dulces hermanos Pagani de Arcor, Alfredo Coto el de la despensa gigante, Miguel Madanes, el hombre de aluminio, Alejandro Roemmers el laboratorio argentino por excelencia, Daniel Carlos Garbarino, Claudio Belocopitt de Swiss Medical Group, que cuida tu salud y su plata, Mastellone Hermanos, Francisco de Narvaez, el de la Tía, Matías Grafunkel que canta Victoria (Vanucci) mientras lava. Y por supuesto, la estrella de todos, Mauricio Macri con el Grupo Macri son los que hasta ahora emergen de esa exclusiva ciénaga de transfugas que estafan y como dijera el uruguayo Blixen, sin disparar un solo tiro roban más que todos los bandidos callejeros y boqueteros de la historia del delito.
Tienen por supuesto artilleros de primer nivel. Alfonso Prat Gay no llegó al Ministerio de Economía por ser un destacado contador para el que 1 + 1 es 2. No. Eso es de mediocres. Ya lo dijo su contratante, 1 + 1 debe ser 3. Y así se hizo. Para eso, Panamá y dólar futuro. Prat Gay no es un hombre común, tiene linaje y prosapia ligada al imperio del azucar, como los Blaquier, y como los Blaquier vínculos con todas las dictaduras, represiones y crímenes de los tiempos de genocidas con quienes convivían en paz, armonía y colaboración. Fue uno de los estrategas destacado del exilio de los verdes que brotaban del imperio Fortabat.
Sturzenegger, Melconian, Esper, Cavallo, Redrado, Lousteau, Lopez Murphy son otras estrellas que en el caso de Panamá, que es solo un punto de este mapa del delito de evasión y lavado, tienen línea directa con el exitoso Mossack Fonseca con quinen se imprimieron los pasaportes de miles de millones de dólares para que vuelen impunes al dorado exilio.
Todos son parte del gobierno que vino para terminar con la corrupción. Pero vaya uno a saber por qué error de cálculo, o acierto, la multiplicó exponencialmente.
Tanto la multiplicó que pensó con mucha precisión el futuro. Sí, el dólar futuro. Por eso como el valor base era de $ 8,40, y habiendo asegurado, jurado por Dios y la Patria que no iban a devaluar, compraron millones de dólares a ese valor, asumieron, y lo llevaron a $ 15. Con lo que por cada millon, en seis meses se llevan 1,75 millones. Un dividendo de 150% anual en dólares. Entre estos buitres internos ya se sabe que están: Niky Caputo, socio de Mauricio Macri con la compra de 3.56 millones de dolares; José María Torello, Jefe de Asesores del presidente y apoderado del PRO con 800 mil dólares; Gustavo Sebastián Lopetegui, Secretario de Coordinación de Políticas Públicas se llevó 310 mil dólares; Chery Socma de Franco y Mauricio Macri engulleron la friolera de 8 millones de dólares; el Secretario de Coordinación Interministerial tomó 1,48 millones de dólares, el mitrista Diario La Nación, tomó 4 millones de dólares, y finalmente, Cablevisión distrajo en este pequeño negocio la suma de 11 millones de dólares.
Toda esta operatoria fue autorizada, luego de la devaluación con que se concretó el mega negocio y maxi estafa por el presidente macrista del Central Sturzenegger y el Juez Bonadío.
Juez que quiso distraer la atención acusando del gran defalco al ex presidente del Cenral al ex ministro de economía y hasta a la ex presidenta, cuando en realidad la operatoria era normal para el país normal que teníamos y se convierte en anormal con las anormalidades que ejecutan los que se creen dueños de la argentina y actúan como tales.
Por suerte ahora hay una tenue reacción judicial y son enjuiciados tanto Bonadío como Struzenegger, quienes junto a Macri y Prat Gay son los grandes piratas de esta floreciente industria del saqueo.
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