Nada. Lo que en realidad intentan, ya con desesperación tanto Vallejos que supuestamente me denuncia por hacer pública –con pruebas- una denuncia, como Ricardo Sanchez que extorsiona al presidente John Paris para que se defina “de que lado está” como una velada amenaza de no aprobar su pliego, y Martín Nievas que se defiende con falsedades y agravios, es evitar la continuidad de las investigaciones sobre el escandaloso negociado con tierras fiscales. Y muestra además la estrecha ligazón entre todos estos personajes con perfiles casi gemelos e intereses comunes. Son los mismos que –junto a todo el rozismo- han tratado de obstaculizar nuestra gestión para evitar justamente lo que hoy abiertamente los altera: la revisión de los negociados, su investigación y denuncia. Cada vez que torpe y temerariamente abren la boca tragan anzuelos y entregan pruebas.
Que debieran hacer en este caso los diputados si representaran los intereses populares y no los de los que se enriquecieron con el despojo y saqueo. Apoyar la investigación y pedir que los aludidos por los pobladores afectados y por el organismo se presenten y expliquen –como puedan- el accionar ilegal que se les atribuye.
Pues no, lo que hacen estos señores es pretender desacreditar ante la opinión pública a quien ha denunciado los hechos de los que ha tomado conocimiento.
En consecuencia, lo que en realidad logran es desnudarse dando una elocuente muestra del lado que están: del de la impunidad, tratando de evitar las investigaciones y denuncias. Ello no hace más que demostrar la enorme red de encubrimientos que se teje tras el mega negociado con la tierra pública. Recuerden los lectores que estos mismos señores han convertido la Cámara en un aguantadero dando refugio rentado a los condenados -por este tema- Nildo Puebla y José Moreno.
Por ello, que estos señores nos ataquen hasta con injurias personales y falsas acusaciones sin pruebas por el solo hecho de investigar y acercar a la justicia los elementos de juicio que llegan a nuestro conocimiento, no hace más que demostrar su perfil ético y moral, y la profunda degradación en que han caído.
Patética la extorsión del diputado Sanchez sobre John Paris. Descalificadora muestra de pobreza espiritual decir que “Paris debe decir si está del lado de la verdad o la mentira, y el bloque sabrá que hacer al respecto”. Vil e infame apriete mafioso con amenaza incluída que se traduce: si París no dice que está de acuerdo con nosotros no votamos su pliego. Lamentablemente para Sanchez, París siempre ha dado muestras de estar con la verdad, de modo que mal podrá darle el gusto de acompañarlo en la villanía poniéndose del lado de la mentira como el quisiera.
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