PEOR EL REMEDIO QUE LA ENFERMEDADEl trascendido de la posibilidad que el gobernador Capitanich proponga al fiscal París para la presidencia del Instituto de Colonización en esta mañana de domingo debe haber tenido efectos devastadores para la salud de los operadores de la impunidad y la corrupción en la Cámara de Diputados.
No son pocos los que luego de leer la nota deben haber vuelto a la cama con un poderosísimo y doloroso ataque al hígado. “Peor el remedio que la enfermedad”, es la frase del día para los que añoraban colocar en el organismo garantes de silencio y cajeros para el millonario negocio que saborearon y añoran. Un muy mal día éste bello domingo para rozistas y algunos compañeros del peronismo íconos de los dieciséis años de derrotas que mantienen municipios como Saenz Peña y Castelli en manos rozistas.
A pesar que no imaginan aún que esto que esperaban saborear como un primer brindis y se ha convertido en un “puta parió” para la salud hepática, no es nada frente a lo que va a ser el supuesto champagne con el que pensaban coronar sus conspiraciones. Va a ser un muy largo trago largo de hiel para sus acerados e insaciables estómagos.
Porque nuestra batalla contra la corrupción que no distingue colores, recién empieza y no tiene retorno.
Y así como contribuimos fuertemente a la derrota de la corrupción rozista, contribuiremos con la misma decisión a la depuración del peronismo, y para ello no necesitamos ni cargos ni avales.
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