martes, 20 de enero de 2015

NISMAN, DE LA BOMBA DE HUMO AL FUERA DE JUEGO.

Decía en una nota anterior a este trágico desenlace para el fiscal, que:
"Como se suele dar en tiempos interesantes, ésta última carta que el poder juega, muestra su enorme impotencia. Creyeron mandar a Nisman a servir un banquete. Todo indica que el que va a terminar en la parrilla es el torpe cocinero.
Cada vez quedan menos dudas que el verdadero encubridor de los criminales de la mutual judía es este inescrupuloso personaje entregado a la empajada de EEUU y a los Servicios de Inteligencia locales y extranjeros."

Nisman fue un instrumento del poder que lo uso hasta donde lo necesitó y hasta donde ya se tornó un riesgo para sus intereses. Lo usó para encubrir, para obstaculizar, para evitar que los asesinos materiales caigan, y expongan a los intelectuales, incluida por supuesto la conexión local, entre los que es muy probable que haya personajes, excepto los familiares, que vemos en los medios llorando a los muertos.

A partir de ello hizo lo que fríamente hace: sacarlo del juego.

Los pormenores de su muerte quizás nunca se sepan. Las muertes inducidas tienen la característica que la presión que se ejerce sobre la víctima es de tal magnitud, como por ejemplo la amenaza seria concreta y creíble de asesinar a la familia, que impide al obligado dejar constancia de las razones que quiebran su voluntad.

Ahora, los mismos que hicieron que el dedo de Nisman tire del gatillo, van a pretender colocarlo en un pedestal para seguir con la parodia que urdieron y para la que tenían en Nisman un "servicio" más.

Entre los que tiraron del gatillo junto al fiscal están los que desde micrófonos, páginas de diarios y pantallas usaron sus lenguas, sus plumas y su impostura para colocarlo, como carne de cañón, a la cabeza de una pataña burda e inconsistente que se derrumbó antes de echar a andar. Todos comandados por los que buscan el regreso a la argentina de los privilegios para pocos, y por ello aborrecen a este gobierno como odiaron a Perón, y todos los que gobernaron, como este, para las mayorías.

Este pobre hombre, víctima de un poder criminal y de sus propias debilidades no pasa después de muerto a ser un prócer. Esas son fantasías de los mismos que lo obligaron y que juegan con nobles sentimientos humanos que conocen pero no practican, y quieren fijar en mentes ingenuas la sensación que ni el ni ellos tuvieron que ver con este final mafioso que lleva su sello inconfundible. 

Todo es muy obvio. El fiscal está de vacaciones con su familia, imprevistamente las interrumpe, vuelve al país, toma una carpeta de trescientas fojas que ya estaban redactadas, va y hace la denuncia en un juzgado que no es el de la causa, no aporta las pruebas, pero si, directamente del juzgado empieza un raid por los canales de televisión del multimedio que le declaró la guerra al gobierno para informar que pedía el procesamiento de la presidenta. Hace una exposición confusa con algunos datos, según sus dichos centrales, como que el supuesto encubrimiento que acusa tiene dos claves y motivaciones indubitables: bajar las alertas rojas de Interpol que pesan sobre los sospechosos iraníes, y potenciar las exportaciones a Iran. Ambas, según ese delirio, pedidas por la presidenta.

Es de tal inconsistencia y endeblez la supuesta columna sobre la que asienta la acusación, que un día después se comprueba que las exportaciones crecieron moderadamente como crecieron con otros países, y menos que muchos. Y la propia Interpol se expresó por escrito que lejos de haber alguna insinuación por parte del gobierno para bajar las alertas rojas, este siempre solicitó e insistió mantenerlas. 

Todo hace pensar que cuando el fiscal terminó la gira mediática impuesta para propalar la infamia, y se sentó, quizás por primera vez, para leer las trescientas fojas, se encontró con que la bomba que le entregaron era de humo. A partir de allí, el desenlace es parte del misterio que suele rodear estas operaciones donde se mezclan, cómplices, mercenarios, criminales y víctimas. Y no pocas veces en cabeza de varias y una misma persona.

La muerte de Nisman no lo coloca ética y moralmente en ningún lugar en el que no haya estado antes de ella. Su patrimonio moral lo construyó mientras estuvo vivo. Y por lo que se pudo ver en sus últimos cinco días de vida, y la década la frente de una causa pisada, no amerita destacarse. Todo lo contrario, es de lamentar que haya sido protagonista voluntario, salvo el último acto, de manipulaciones y confabulaciones impropias de un hombre digno. 

Suena duro, pero la sensiblería corre por cuenta de hipócritas, como toda la oposición política que al decir del mismo poder que les reclama más vileza, no junta un balde de bosta. Ya vimos a Massa, Macri, Binner, Carrió, Cobos, y toda esta caterva de probados farsantes, inútiles y traidores lloriqueando por el mismo multimedio que le dio su tironcito al dedo de Nisman, haciendo discursos falsos impostando consternación, mientras íntimamente celebraban que la desaparición de Nisman pueda servir para que no se exponga y derrumbe la infamia montada.

El gobierno debe hoy más que nunca impulsar todos los cambios que sean necesarios para que la justicia sea un poder que merezca respeto y esté al servicio de la verdad en todos sus niveles. Para que los jueces sean garantes de Constitucionalidad y Justicia, y nunca de conspiración, mafia e impunidad.

Para ello, debe liberarse de inmorales que usurpando espacios reservados para hombres dignos, se ponen al servicio de poderosos corruptos que los usan, como a Nisman, en perjuicio de las mayorías. 

Jueces y Fiscales pusilánimes, fallidos éticos y morales llevan a estas tragedias, cuyas víctimas principales no son ellos cuando les toca, sino el pueblo argentino permanentemente. 

El colmo sería que estemos obligados a hacerles homenajes, y nos manden llorarlos, cuando ya no les sirven y los saquen del juego.

No hay comentarios:

"NO ME PREOCUPA EL GRITO DE LOS VIOLENTOS, DE LOS CORRUPTOS, DE LOS DESHONESTOS, DE LOS SIN ÉTICA. LO QUE MÁS ME PREOCUPA ES EL SILENCIO DE LOS BUENOS" Martin Luther King
"LLEGARÁ EL MOMENTO EN QUE NOS ENSARTAREMOS EL SOMBRERO HASTA LAS OREJAS FRENTA A LAS IGELSIAS, Y NOS DESCUBRIREMOS RESPETUOSAMENTE ANTE LOS BANCOS" (Comentario de don Aledo Luis Meloni sobre el veto de Angel Rozas a la Ley de descanso dominical)